PoesíaPoesía Digital

Miroslav Holub

El discreto inmunólogo Miroslav Holub

Si hiciera una lista con los escritores que más aprecio, y después los agrupara según profesiones, creo que uno de los grupos principales sería el de médicos: Gottfried Benn, Freud, Baroja, Hipócrates, William Carlos Williams, Thomas Browne, Chéjov, Luis Martín Santos… (por no decir lo mucho que me gusta imaginar las páginas que podría escribir Gregory House, segunda encarnación del inolvidable que creó otro médico, Conan Doyle…). ¿Hay alguna razón, me planteo, para esa afinidad? Aventuro una, general: su distancia ante la vida, la precisión – cruel o materialista, según algunos; honesta, para mí – de sus relatos. Aventuro otra, más particular: su gusto por la escritura física, corporal, donde la palabra puede ser abstracta, pero siempre es palpable. Dos características que, me parece, tiene la poesía del checo Miroslav Holub (1923–1998).

Por el hábito literario que hemos ido adquiriendo, la biografía de Holub –que debería, al menos, best replica watches inquietarnos– parece fácil de reducir a símbolo de época: a un inicio tardío como poeta, y una cierta relevancia crítica, le sucedió una larga alternancia de prohibiciones, permisos y prohibiciones: años enteros sin poder publicar en su país, convertido en “no persona” por los decretos comunistas, mientras las copias ilegales de sus libros se multiplicaban y las traducciones de sus libros se sucedían en Alemania, Inglaterra o EEUU: prestigio internacional como inmunólogo -su descubrimiento de una mutación genética en ratones (los “ratones desnudos”) que ha sido fundamental en el tratamiento de enfermedades autoinmunes como el SIDA o la leucemia- y dificultades constantes para poder viajar al extranjero - en su época más afortunada consiguió un permiso para ir a EEUU una vez cada tres años-, o incluso para trabajar en organismos sanitarios checos (en los años 70 tuvo que “denigrarse” públicamente para que se le admitiera como investigador asociado del Instituto Nacional de Medicina Experimental): una historia manida para nosotros, un reto humano para quien lo conoció.

Aunque en España sea un desconocido, o bordee tal estatuto, Holub no es un inédito: ya en 1990, Poesía Cátedra publicó una antología suya (sencillamente: Poemas), traducida por Carlos Cid Abasolo y Šárka Grauová.

Las leyes de la probabilidad crítica dicen que, tras la exposición biográfica con la que el articulista demuestra que se ha documentado, aunque lo que quiere insinuar es (¡faltaría más!) que lo sabía todo de antemano, conviene requebrar un lamento (o aullido) sobre la terrible desgracia que supone no contar con una (y buena) traducción de su obra (y siempre se dice que es una desgracia, mireusté, aunque el poeta en cuestión éste sea, no sé, el Bousoño yiddish, o el Guillén eslovaco, o algo semejante). Por una vez, admito que la exposición varía: aunque en España sea un desconocido, o bordee tal estatuto, Holub no es un inédito: ya en 1990, Poesía Cátedra publicó una antología suya (sencillamente: Poemas), traducida por Carlos Cid Abasolo y Šárka Grauová. La selección es breve, pero abarca todos los libros de Holub publicados hasta aquel momento y la traducción, aunque en ocasiones parezca farragosa si se coteja con las ediciones inglesas que supervisó el propio poeta, evidencia soltura métrica y un sentido marcado, intenso del lenguaje. Observando las semejanzas con algunos poetas españoles de ahora, resulta chocante que tan pocos hayan reparado en poemas como “Bodegón vespertino con protoplasma”:

Las casas se cubren
del liquen del crepúsculo,
el noticiero de la radio
trepa por las fachadas,
canta la hamburguesa.

El protoplasma llamado
así–es–la–vida
saca de todas las ventanas
protuberancias con avizoras cabezas de viejas,
engulle transeúntes,
penetra en las camas de la casa de enfrente,
absorbe lágrimas, añicos de riñas,
embarazos y abortos,
mancha carricoches y televisores,
se inflama con los precios de los huevos,
se hincha, mucoso, de adulterios,
segregando exosporas
eso–en–nuestros–tiempos–no–pasaba.

Y aún de noche fosforece
como mar muerto desecándose

entre edredones, mermeladas y estratosfera.

Ahí está casi todo Holub, aunque sus tonos y matices no puedan reducirse a una sola estructura: el choque mordaz entre lenguaje cotidiano y científico, o la falacia de su propia separación literaria; el aire malsano del sistema soviético -que, al final, tantas veces se puede ajustar con otros tiempos; la fascinación por lo grotesco natural; la visión cansada de alguien que, pese a todo, no olvida su poco de ternura. Y podría seguir añadiéndose: los movimientos entre lo cierto y lo incierto, la imagen cotidiana que proyecta una realidad histórica. No extraña que un inglés extraño como Ted Hughes tuviera a Holub entre sus principales referencias, ni que Hughes lo equiparase con otro moralista irónico como el polaco Zbigniew Herbert. (Lo extraño –o no tanto, ya ven– es que tres autores como éstos –Herbert, Holub, Hughes, incluso parecen salmodia- aún sigan “aplazados” en España).

Echo cálculos de espacio y observo que ya sólo puedo optar por una conclusión, algo que suene tenso, admonitorio: En un tiempo literario que parece propenso a la burocracia, con sus bálsamos de tópico, de lenguaje encasquillado, de panorámica en trastero, hacen falta… Luego pienso que Holub no estaría de acuerdo con una mirada rencorosa, y creo que sólo puedo dejar que hable él, otra vez.

"Viaje al interior"

Viajando a las fuentes del lenguaje
os perdisteis largo tiempo en el paraje de medianoche donde
en vez de piedras yacen ojos abiertos.
Luego, el camino se hundió como el hielo en el charco
y caisteis. Unos miles de años.

Os encontrabais
en una yerma bodega de telaraña sin
ventanas. En el techo se acurrucaban dos
tres palabras tullidas
(yo… fuera… verde)
y por el suelo rodaba
un gañido.

Disteis un portazo y ahuecasteis el ala.
El interior acaso, os dijisteis,
el interior quizá esté fuera.

Fruela Fernández










Retro jordans for sale, Cheap foamposites, Cheap foamposites, jordan retro 5, cheap jordans for sale, foamposites For Sale, jordan retro 12, jordan retro 11, Cheap jordans for sale, jordans for cheap, jordan retro 11 legend blue, retro 12 jordans, jordan retro 13, jordan retro 9, cheap soccer jerseys, Canada Goose sale, cheap jordans, cheap jordan 12
cerrar ventana
cerrar ventana